Tradicionalmente se venía viendo el ahorro y la eficiencia energética desde un enfoque económico; era habitual la frase “el kWh más barato es el que no se consume” aunque no siempre es cierto. De un tiempo a esta parte y, especialmente, con la emergencia climática ya declarada, está asumida la dimensión ambiental: el kWh más sostenible es el que no se consume. Pero aún, falta incorporar la dimensión social, que sigue fuera del foco y que las organizaciones, colectivos y empresa que trabajamos en la Economía Social y Solidaria (ESS) debemos poner en valor.
Labox2020-03-07T15:29:54+01:0007-03-2020|Categorías: Artículo|Etiquetas: Economía Social, Eficiencia, Mercado Social de Madrid|Sin comentarios
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